-¿La letra y la música, con ese ritmo de joropo al tiro?
-Todo, todo junto, al tiro como joropo, con esos acordes, y la letra era como si yo me la hubiera sabido. Entonces me asusté también. Si yo no soy máquina de hacer canciones. Cantaba canciones de la Violeta y había hecho un par de canciones, horribles -sonríe-, que no vamos a decir cuáles son, aunque las he rescatado ahora, fíjate, las he recogido del tarro de la basura, porque encuentro de que repente son muy drástica conmigo misma.
-Todo, todo junto, al tiro como joropo, con esos acordes, y la letra era como si yo me la hubiera sabido. Entonces me asusté también. Si yo no soy máquina de hacer canciones. Cantaba canciones de la Violeta y había hecho un par de canciones, horribles -sonríe-, que no vamos a decir cuáles son, aunque las he rescatado ahora, fíjate, las he recogido del tarro de la basura, porque encuentro de que repente son muy drástica conmigo misma.
Isabel Parra ya tenía para entonces ese contingente de canciones con música suya y versos de Violeta Parra, como el vals "Qué palabra te dijera", la tonada "Como el roble en el verano", la canción joropo "Lo que más quiero" y las canciones "Solitario solo" y "Al centro de la injusticia", entre otras. "Había hecho canciones con texto de la Viola y música mía, que eso no me costó nada", recuerda. "Pero son urgencias, esos textos de la Violeta había que mostrarlos porque son maravillosos".